*Condenan a estafador que vendió casas fantasmas a familias vulnerables en Chiguayante*
_Un hombre fue sentenciado a cinco años de cárcel y una multa por engañar a nueve familias con un proyecto habitacional que nunca se realizó. Las víctimas habían recibido subsidios del Serviu tras el terremoto del 2010 y perdieron todo su dinero._
A cinco años de prisión y una multa de 12 Unidades Tributarias Mensuales fue condenando un hombre por engañar a nueve familias con la venta de viviendas inexistentes. El acusado, Luis Alberto Sanhueza Cole, fue declarado culpable de tres delitos de estafa y cinco de defraudación, cometidos entre 2012 y 2015 en la comuna de Chiguayante.
Según la sentencia, el estafador se aprovechó de la confianza y la necesidad de las víctimas, a quienes les ofreció comprar casas en un proyecto habitacional que nunca se materializó. El acusado les solicitó a las víctimas adelantos de dinero para reservar las propiedades y luego desapareció con el monto defraudado, que supera los 100 millones de pesos.
La fiscal adjunto Maritza González Palavecino, quien llevó adelante la investigación, destacó el veredicto condenatorio y señaló que se trata de casos de una gravedad tremenda. “Las personas víctimas de estos delitos, la mayoría, fueron elegidas con pinzas”, afirmó.
“Posterior al terremoto del año 2010, sus viviendas que quedaban en Villa Futuro, en unos bloques de departamentos, quedaron inhabitables, así fue declarado por el Serviu. Es así que varios años después se les concedió un subsidio para que pudieran construir nuevas viviendas. Se formó un comité, el comité Nueva Dignidad, y a través de aquello se logró llevar a cabo un proyecto y poder tener una casa digna. Estas personas, producto de su estado emocional, económico, no se encontraban en buen pie para arrendar ninguna casa o departamento, tuvieron que vivir de allegados. Las víctimas, vieron en este caso una posibilidad para tener una vivienda digna. Sin embargo, el acusado, en este caso ya condenado, aprovechándose de los subsidios que otorgó el Serviu, de forma maliciosa y a través de engaño, obtuvo el dinero que el Serviu les concedió a estas personas”, detalló la persecutora.
Tras la condena, la fiscal dijo que “estamos conformes, sin embargo, igualmente estas familias fueron dañadas y esperamos contar con el apoyo de las instituciones pertinentes para que vean de qué forma puedan resarcir todo el daño que han pasado. Es más, una de las víctimas falleció, otra actualmente está desahuciada y obviamente, como dijo una durante el juicio y su declaración, a nuestra edad ya no es momento para comenzar de nuevo”.
